Dylan y Luz.

   Dylan era un hombre guapo, apuesto y cordial. Vestía pantalones de colores cálidos y jerseys de colores.

   Pero tenía un problema... La luz y el colorido de su vida, provenían de afuera, y luego... Por dentro estaba... Vacío...

   Toda la semana se centraba en su trabajo, sus lavadoras (pues vivía sólo), y su ropa.

   Estaba tan vacío... Que tras esa apariencia de tranquilidad y falsa felicidad, se pasaba las noches llorando... Y luego, otro día más como si nada...

   Lo que el no sabía, és que a la vuelta de la esquina vivía Luz... Una chica maravillosa. Luz destellaba felicidad y tranquilidad por dónde fuese. Daba igual lo que llevase puesto, pues era felicidad pura y real, lo que emanaba desde dentro.

   Y un día... Un día cualquiera, quizás un Miércoles de Enero... En el frío invierno de su ciudad, se produjo el encuentro.

Luz salió a por pan para acompañar las lentejas. Dylan salió también a por pan, para acompañar su pisto y el pollo. Y allí... Cómo si los demás no importasen... Surgió el Amor.

Se miraron. Y és como si se empoderase el silencio, y sólo ellos bailasen al son de las estrellas... Sólo... Que era de día, y había más gente alrededor... Jajaja

   Pero, que surgió la magia, és verdad... Al salir de la panadería, quedaron para la noche, y és un misterio lo que podría surgir de ahí... Pues inmensa luz de nuestra chica, junto con el vacío de Dylan, como iba resultar... Sólo Dios lo sabe.

    Y llegó la noche, Luz estaba impecable, con un sencillo vestido blanco de diario. Y Dylan, colorido, como siempre, en tonos verdes... Pero por dentro seguía igual de vacío... Cómo siempre... Hasta que se encontraron, y era como si un intercambio de energías comenzaba a fluir entre los dos...

Dylan, empezó a encontrarse más tranquilo... Más pleno... Más feliz. Ya no era solamente pura fachada...

Y Luz, por su parte, era... Cómo si flotase un poquito más bajo, a ras del suelo, percibiendo la realidad como más estable, y menos 'fantasiosa'.

   Hablaron durante dos horas, y eran ya como un matrimonio de unos diez años... Pues en ellos había conexión, Paz y cercanía... Y se besaron... Y las energías de luz, plenitud y calma, los envolvían como un cálido abrazo.

   Y al més, se casaron. Tenían planes de comprar una casa, ya que vivían de alquiler. Y fueron felices... Tanto... Que al año de casarse, ya tenían un par de muchachitos por la casa...

   Y... Colorín Colorado éste cuento se ha acabado.

Sean Felices ❤️

Dyana Torres.